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Lo más terrorífico de TWD no son los zombies. Es la audiencia de la serie

El pasado domingo de estrenó el primer capítulo de la novena temporada de The Walking Dead.

La popularidad de la serie lleva unos años de capa caída. Y es que el público está cansado de ciertas tramas que no llevan a ningun lado y escenas de acción que parecen sacadas de un capítulo de El Equipo A.

La novena temporada ha empezado con un cambio de showrunner y la voluntad de hacer las cosas distintas. Además se ha confirmado que algunos de sus actores se van de la serie, por lo que nos esperan escenas impactantes en pantalla.

Pero lo más terrorífico de su regreso ha sido su pobre audiencia. Y es que apenas ha conseguido reunir a 6,08 millones de espectadores, el peor dato de la serie desde el sexto episodio de la segunda temporada.

Las comparaciones son odiosas, y es que la octava temporada debutó con 11,44 millones de espectadores. Veremos si consigue remontar estas cifras...

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