Episodio 26: Pingu y el abominable muñeco de nieve

Pingu está leyendo en silencio su cómic cuando se encuentra con una imagen de un monstruoso abominable muñeco de nieve. Dibuja su propia versión, y asusta a Pinga con ella. Pingu luego dibuja una huella de tres dedos y él y Pinga se apresuran alrededor del iglú jugando para ser perseguidos hasta que corren completamente hacia Madre, derribándola. En el exterior, Pingu crea algunas huellas abominables de muñeco de nieve hechas de un par de raquetas de nieve con cucharas atadas a ellas. Luego se va, fingiendo ser un abominable muñeco de nieve, dejando un rastro de huellas detrás de él. Pinga sale a buscarlo, ve el rastro de huellas y las sigue. Mientras tanto, Pingu, que encontró una manta vieja y se la puso sobre la cabeza, continúa haciendo huellas. Oye a Pinga que lo sigue y se esconde detrás de un bloque de hielo. Cuando Pinga se detiene en el bloque, Pingu la asusta y la persigue alrededor del bloque. Pingu se tropieza y pierde una de sus raquetas. Mientras se lo está poniendo, Pinga aparece detrás de él, se da cuenta de lo que está pasando y, cuando Pingu se levanta, tira la manta, asustando a Pinga. Ambos se ríen, y luego continúan juntos. Más tarde, se dirigen a casa cuando regresan al lugar donde Pingu tendió una emboscada a Pinga, y Pingu descubre algunas huellas grandes que no fueron hechas por él. Luego escuchan crujidos en la nieve y ven una enorme sombra en el hielo. Aterrada, Pingu huye, dejando a Pinga, que se cubre los ojos y tiembla de terror. Ella oye un estornudo, y mira. De detrás de un bloque de hielo viene un verdadero muñeco de nieve abominable llamado Bajoo, pero él no es mucho más grande que ella. Pinga y Bajoo luego van a buscar a Pingu, y el muñeco de nieve explica que él también ha estado siguiendo las huellas. Bajoo se esconde rápidamente cuando papá viene en el trineo motorizado para llevarlos a casa, pero cuando se van, se despide para despedirse.

Comentarios (0)